Cosas de Menorca 3 - Cultura talayótica

La Cultura Talayótica.

Poblado talayótico

Entre el año 3.000 y 1500 a.c. transcurre el preíodo pre-talayotico, una época en la que la humanidad aún vive en cuevas y durante la cual se desarrolla una cultura de gran complejidad y que hoy todavía guarda muchas incógnitas y que da paso entre los años 1500 y 123 a.c. al período Talayótico.

Debido a su antigüedad, a los fenómenos geológicos y a la acción del ser humano, los restos de esta cultura están prácticamente extinguidos. Menorca es un lugar que por ubicación y por el tipo de piedra y orografía, ha conservado una gran cantidad de estos restos históricos, que no se encuentran por otros lugares de Europa.

De la época pre-talayótica destaca la primera construcción del ser humano al aire libre, se trata de la "Naveta", es una construcción de piedra con forma piradimal de base rectangular, se la llama así porque su forma recuerda al casco de una nave invertida. Con una puerta de acceso en uno de los laterales estrechos, su uso era cómo edificio funerario. Analizado con detenimiento podría ser el precursor humilde de las sofisticadas pirámides.

De la época talayótica, destaca que es el primer momento en la historia en que se crean núcleos urbanos, y estos se desarrollan alrededor de unas construcciones muy peculiares de piedra en seco cómo són el "Talayot" y la "Taula", dos elementos muy peculiares que aún hoy representa todo un misterio su función. A parte de la gran cantidad de restos que hay en Menorca, el único monumento que existe de la época y que es referente a nivel mundial es el Stonehenge en Inglaterra.

A día de hoy, Menorca cuenta con un gran número de restos talayóticos (cerca 3.500 enclaves) de los cuales algunos están totalmente excavados y presentados al público para poder visitar, entre los más importantes cabe destacar: La Naveta d'es Tudons, el poblado de Torralba d'en Salord, La Torre d'en Galmés, la necrópolis de Cala Morell o la Taula de Torretrencada.

Todavía, actualmente se siguen encontrando y descubriendo restos, incluso la isla cuenta con diferentes excavaciones activas, que acogen a arqueólogos y a estudiantes de arqueología de diferentes partes del mundo,  para que realicen prácticas de campo.

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Cosas de Menorca 2. La Mahonesa.

LA MAHONESA.

 

Este és unos de los productos gastronómicos estrella de la isla de Menorca, conocido y exportado a nivel mundial, con el tiempo se ha ido convirtiendo en un producto habitual en las casas españolas, ideal para el acompañamiento en muchos platos e ingrediente principal en otros cómo la ensaladilla rusa.

Esta salsa de acompañamiento, es de orígen Menorquín aunque cuenta la leyenda que su aparación fué fruto de la casualidad y dice la história que durante la dominación francesa que se produjo en Menorca, el Duque de Richelieu, en plena campaña, se paró en una casa de campo cerca de la zona de Mahón, y le pidió al payés de la casa algo para comer, el payés, que en esos momentos no tenía nada preparado, improvisó en un momento, una salsa preparada con yema de huevo, sal y aceite y se la ofreció untada en unas rebanadas de pan. El duque Richelieu, asombrado por el resultado de tal manjar, le pidió la receta al payés y se la llevó a su regreso a Francia, bautizándola como "Mahonnaise", popularizándose rápidamente en las cortes y expandiéndose por Europa rápidamente hasta convertirse en el producto que es hoy en día.

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Cosas de Menorca 1

Menorca

La isla de Menorca es una de las más respetadas del mediterráneo, un pequeño paraiso reconocido cómo reserva de la biosfera por la comunidad europea.

Además es un paraiso lleno de rincones mágicos e inolvidables, y entre sus encantos destacan las playas vírgenes que se encuentran repartidas a lo largo de la costa de Menorca, unos pequeños bocetos de libertad, que en la mayoría de casos presentan un acceso difícil y restringido, y en otros casos hay que andar para poder llegar a ellas, por el conocido ' camino de caballos', una pista forestal que da la vuelta a toda la isla siguiendo la costa.

Es recomendable disponer de un vehículo própio, o la opción del alquiler de uno, para poder desplazarse con total libertad por la isla, incluso para poder acceder a ciertas playas, a veces es más práctico ir en moto.

Menorca no sólo brilla por fuera, también es un entorno perfecto para practicar el buceo o snorkel, cuenta con una gran vida marina de la que disfrutar y relajarse, simplemente contemplándola parece trasladarte a un mundo dónde el tiempo no importa.

Desde siempre se ha llamado a Menorca la isla de la calma y lo cierto es que puedo usar muchas palabaras para intentar describir la sensación de perderse por la isla, pero siempre me quedaré corto al elogiar y describir las playas, la gastronomía y la cultura de Menorca.